>>103632 Guardo cupo.

Ficha reciclada porque de verdad quiero usar este pj ;-; >Nombre Angeline "Angie" Kaikaina >Edad 18 >Sexo Femenino >Historia Angie proviene de la isla volcánica de Kaikaina, un lugar místico y apartado del mundo, conocido por su naturaleza salvaje y su cultura ancestral. Los habitantes de Kaikaina viven en estrecha comunión con la naturaleza y sus deidades, a quienes creen que deben su existencia. Desde pequeña, Angie fue instruida en los caminos de los ancestros, entrenándose como una Toa Kaitiaki (Guerrera Guardiana), cuya misión es proteger los santuarios sagrados de la isla y servir como intermediaria entre los dioses y su pueblo. Angie fue entrenada desde temprana edad en el arte de la espada, convirtiéndose en una espadachina hábil y devota. Sin embargo, su destino cambió cuando los grandes desastres comenzaron a afectar incluso a su aislada isla. Angie fue enviada en una misión sagrada para encontrar respuestas en... no sabe donde exactamente. Pero confia en que sea la voluntad de los dioses que ella encuentre alguna respuesta en su viaje. >Clase inicial Guerrera >¿Que tal algo sobre ti? -El nombre de su espada es Shikimaru. -Su padre es un isekaiado, por lo le contaba cosas como anime e Internet. -No sabe sumar ni restar. Ficha resubida con más detalles

>>103632 ficha resubida >Nombre Lila Borbón, reina de los engranajes >Sexo Femeninofemeninofemeninofemeninofemeninofemenino >Edad 12 >Lugar de origen La Tierra, en algún lugar de letrinoamérica en el lejano año 2025 >Pic Este gremlin >historia En un taller muy grasiento, nació una niña. Cero ácido fólico, algo de alcohol en el embarazo y una llegada prematura a un hogar poco preparado para cuidar a un niño fueron la receta perfecta para el nacimiento de la hiperactiva Lila. Ojona, problemática, llena de curiosidad y una chispa aventurera infantil que no la deja estar quieta, este pequeño gremlin fue un dolor de cabeza para un padre gruñón y gordo. Desde bebé fue un tornadito en su casa, naturalmente siempre fue curiosa, causando desastres en el taller en el que amaba pasar el tiempo... Pero los dibujitos de superhéroes fueron el punto de inflexión que cambió su vida... para volverla incluso más loquita. Demasiado inspirada por las historias heroicas, varias veces su padre le vio intentando armar tonterías con lo que encontraba en el taller. Su primer invento, que sigue conservando a día de hoy es también su más fiel compañero: Máximo, el superhéroe de alambres... también es el único juguete que tiene. Sus padres no invertían mucho en ella. >¿Que tal algo sobre ti? -tiene un pequeño bloc de notas que le robó a su papá donde anota todos sus inventos imaginarios y aventuras. Se llama "el libro de los ingenios" ...no tiene mucho ahí fuera de Máximo y algunas aventuras mentales que tuvo. -su apodo inventado es "reina de los engranajes" pero su nombre de héroe es supergirl, ella es la verdadera, no la de dc. >sobre Máximo -tiene una super capa invencible. En realidad sólo es un pedacito de tela que sirve de capa. -¡puede hablar! En realidad no, pero Lila siempre te dirá que sí. imité al otro negro en este apartado y le puse algún que otro detallito

>>103640 (Antes de mandar turno, solo para confirmar: ¿Isekaiada, verdad?)

>>103643 Pues si opecito kek

>>103635 (No hay problema) >>103637 (Antes de que se me olvide, ¿Te gustaría hacer un pequeño prólogo para tu personaje, antes de adentrarse de lleno hacia Midgard?... Es decir, empezar tu historia unos meros días antes de que tú personaje reciba su mision, como prólogo, para allí después saltar con su viaje y llegada a Midgard) >>103644 (Perfecto, y de la misma forma aprovecho y pregunto, ¿Te gustaría, o no habría problema, si empezamos la trama de tu mona con un prólogo, es decir, desde antes de ser Isekaiada, y de ahí saltar hacia su viaje a Midgard, renacida allí?)

>>103645 No veo porqué no.

>>103645 Dale

>>103632 No quería hacerlo, pero voy a reciclar un poco. No se me ocurre nada ahora mismo. :^( >nombre Gaiana Noga Tataria >sexo Femenino Pura raja en este rol. >edad 24 años >lugar de origen Extranjera de oriente, hija de la tribu Tataria. Ha llegado lejos a puro pie (literalmente). >clase Una guerrera en busca de la maestría marcial universal y arma definitiva... y la ha encontrado: el Poderoso MAYAL de madera, arma de campesinos y dioses por igual. Fácil de hacer, difícil de manejar. >historia “¡Señores de la estepa, escuchen! Hice a los hombres pobres en ricos, hice a pocos en muchos. ¿Hay mentiras en mis palabras?” Siempre piensa que su trasfondo no es importante para nada, naciendo y creciendo en una tribu remota en la estepa peligrosa donde los monstruos y bandidos proscritos abundan, rapiñando a todos los que se pongan en su camino y sin mencionar las guerras entre tribus o guerras contra el extranjero que quiere expandir su territorio. Hija de cazadores, hija de la estepa, arrebatando vidas desde temprano y adaptándose al ambiente cruento e implacable del frío y calor. A los 13 años fue comprometida con Hulagu Esen Tataria, su tío segundo o algo así, la sangre de su familia y tribu no está demasiado diluida y de ahí su retraso, aunque lo que importa aquí es que es la fecha en la que "El Oscuro" comienza a unificar las tribus para rechazar a los invasores, y su tribu no fue la excepción. Lo vio llegar a él montando ese extraño animal, detrás de sí un paisaje oscuro, un horizonte que no se podía ver debido a la cantidad de tropas a caballo y todos ellos con arcos a sus espaldas, también hermosas banderas rojas y doradas ondeando al son del viento. Fue magnífico, quedó maravillada por el señor de la guerra de oscura piel. Al final su tribu no se unió a La Horda y "El Oscuro" lo dejó pasar, aunque Gaiana se iría con ellos por el impulso tonto en los niños y miraría la guerra de cerca siendo la escudero de "El Oscuro". Sus ojos pequeños siempre se separaban de la carnicería y solamente podía ver un luchador perfecto, honorable, gran líder, perfecto estratega, un hombre que lucha adelante junto a los suyos por un bien mayor, siempre bajo el estandarte rojo y dorado de la unión y revolución. Gaiana, encantada con la idea de alguna vez ser como su héroe, abandonó el campo bélico y comenzó su peregrinación hacia el oeste como alguna vez lo hizo él, ahí encontraría la fuerza. Actualmente una mujer forjada en sangre, una buscavidas que camina errante por tierras que no son suyas. Aún le falta mucho camino para perfeccionar todo estilo de pelea existente y además ser como su héroe del que nunca más ha recibido noticias, ni de él ni de sus tierras.

>>103637 Prólogo Olas borrascosas, nubes negras con truenos que rugían cuál lobos ennardecidos, vientos inclementes que solo en antiguas leyendas se habían nombrado,y por si fuera poco, las cosechas estaban marchitando poco a poco con el pasar de los días... Los ríos arreciaban a su vez, y, por si fuera poco, el contacto entre el mundo de los dioses, y el mundo terrenal, se veía interrumpido sin avisos ni mucho menos causa lógica alguna. Por más que los ancianos de los templos se reuniesen y realizasen diversos rituales de limpieza y reconexión, nada parecía tener efecto, y por si fuera poco, la actividad volcánica, lenta pero segura, empezaba a sentirse con leves temblores por toda la isla, y desde el tope de aquellas antiguas montañas, pequeñas humaredas se asomaban por todo lo alto. En los pueblos, no obstante, a pesar de las dificultades, los aldeanos continuaban con sus labores diarias, temerosos, sin lugar a duda, ante todo aquel ajetreo que estaba sucediendo por todas las islas, ocasionando a su vez que hubieran congregaciones más grandes de lo habitual en cada uno de los santuarios: Niños, jóvenes, adultos, ancianos, e incluso animales domésticos, cargaban consigo amuletos de protección, pidiendo a los dioses en cada una de sus oraciones, el cuidado de sus familiares, sus cosechas, y sus hogares, como no. Sin embargo, cada vez que las congregaciones finalizaban... Los santuarios terminaban agrietados, golpeados, incluso arañados, y por más que estuvieses atenta en cada una de estas congregaciones, no había señal alguna del causante de tales sacrilegios... Ya casi ha pasado 1 mes desde el inicio de todos estos extraños acontecimientos, y si bien, las penurias y rugires de la tierra no se habían acabado... Parecían haber llegado hasta un extraño "Alto", si es que podía llamarse así: No empeoraba, pero tampoco cesaban. El día de hoy, te encontrabas en el Santuario, realizando tus tareas cotidianas, entre las que se encontraban: Limpiar el piso, limpiar las cajas de petición, cortar un poco el pasto, revisar el agua del pozo, entre otras muchas más. No muy lejos de allí, se encontraba el bosque Shinto, mismo que servía como fuente de refresco para animales, viajeros, habitantes y demases. La brisa estaba fuerte, más casi que parecía costumbre que el viento estuviera así desde hace no mucho, más los árboles temblaban al igual que sus hojas y sus ramas... De seguro el tendedero se había vuelto a caer en casa de tu padre, si es que su ropa no se había ido volando por todos los aires, de nuevo. ...Aún así, a pesar de la cotidianidad del asunto... Alguien parecía que se encontraba desde temprano por aquel lugar, más no daba indicios de querer adentrarse demasiado al santuario. >>103640 Prólogo Aquella tarde era calurosa, bastante calurosa, de hecho, puesto que el verano ya había llegado, y la factura de luz había llegado tan cara que tu padre decidió no volver a encender más nunca en su vida el aire acondicionado, y el enorme ventilador industrial que tenían... Lo conectaba subiéndose a un poste que estaba al lado, y casi electrocutandose cada vez que subía a robarse la luz... Pero, era llenarle los bolsillos a los ricos y a los políticos, o darle de comer a ti, a el, y a su moto, que siempre se encontraba en el garage, y a duras penas la sacaba para no desgastarle la pintura ni mucho menos. Por suerte, en aquel momento tu padre no se encontraba en casa, puesto que había ido a comprar unas cuantas cosas, pero ya más bien se había demorado un poco, seguro que estaba comprando alguna coca cola, o una bolsa más de tuercas, tornillos, engranajes y demases, al fin y al cabo, había dejado la tapa de la moto en el suelo, junto con su caja de herramientas... Algo descuidada, por supuesto. Tal vez habían Sido ideas tuyas cuando fuiste la última vez hacia el garage, pero, parecía que entre sus cosas, había lo que parecía ser una máscara o bandana de luchador, pero cuando habías tratado de verla a más de talle, tu padre te saco casi a las patadas del taller. Ramiro, el ayudante que tenía tu padre, aquel día iba a llegar tarde, puesto que tenía cita con el médico, pero... Ya era prácticamente de tarde y no había ni rastro de el... Mucho mejor, así habría muchos menos testigos o chismosos que le dijeran a tu padre cuando ibas a hacer tus inventos locos en el taller, el único sería Máximo... ¡Pero máximo es muy fiel a ti, y no es para nada chismoso!. De comer, había pan tostado con jamón y queso, acompañado de jugo de naranja bien frío, así que con eso podrías amortiguar hasta que llegue tu padre... De seguro no le molestaría que te asegurases de que sus taladros y martillos, funcionasen correctamente, ¿Verdad?... ...Eso si, no muy lejos, se escuchaba una furgoneta con... Esto, a todo volumen https://youtu.be/DX9pmm2au90?si=Rtwzd-cPm8RiRzvx https://youtu.be/I1LhtR5URP0?si=B8AhCptfqvqulgR_ Muy adecuado para un sitio que por alguna razón, se llamaba La Matanza... Y que ironicamemte, era uno de los sitios más seguros de la región, según la radio

>>103649 (Uy carajo esto no lo ví antes de enviar turno, perdón) >Spoiler (Sin problemas negro, no te preocupes. Also, ¿Te gustaría, o no habría problema, de tener un pequeño prólogo, antes de irte rumbo hacia Midgard, o prefieres iniciar ya en el día actual, con tu personaje llegando a X lugar del oeste?)

>>103652 Como tú más quieras, negro. Yo solamente quiero rolear, kek.

>>103632 >Nombre Conde Ludovico "El Bisco" von Hohenhalm kek >Sexo Solo con Menores y Virgenes >Edad >Pic >Clase Arquero >Historia, corta o larga, o algún fragmento sobre ti Conde Ludovico von Hohenhalm es, en teoría, el último heredero de la noble casa Hohenhalm. Alguna vez su linaje gozó de fortunas y vastas tierras, pero generaciones de mala administración y lujos excesivos los dejaron sumidos en deudas tan monumentales que hasta el apellido parece hipotecado. La nobleza le ha dado la espalda, y su nombre, otrora motivo de respeto, hoy solo despierta risas entre el populacho. Su apodo, "El Bisco," es una burla cruel y casi legendaria: además de su leve estrabismo, su puntería con el arco es tan desastrosa que las flechas parecieran guiarse por caprichos del viento y no por su técnica. Esto ha hecho que su reputación de arquero sea tristemente famosa, y su habilidad se sostiene más en un cúmulo de golpes de suerte que en verdadera destreza. Despojado de sus tierras, sobrevive ofreciendo sus “servicios” como guardia ocasional o escolta, aunque la mayoría de sus clientes suelen ser viajeros o mercaderes en apuros que no pueden permitirse mejores guardaespaldas. Por extraño que parezca, su suerte (y la desventaja que representa para los enemigos) lo ha mantenido con vida hasta ahora. Ludovico es un hombre que ha aprendido a reírse de su propia desgracia, pero en el fondo guarda la esperanza de que algún día una aventura lo saque del lodo y le devuelva al menos un poco de la gloria perdida de los Hohenhalm… aunque, con su suerte, lo más probable es que se pierda de camino.

>>103657 >Edad La muy longeva y mítica edad de 29 añitos

>>103651 >Lila "¡pow!" Rodando en el suelo, la niña entró al taller vacío, manchándose la ropa y el pelo de grasa antes de arrodillarse y lanzar puñetazos al aire. "¡pow, pow!" Cada movimiento de brazo era una onomatopeya, la reina de los engranajes tiene orígenes en ciudad principal, algún lugar de algún cómic, y es una heroína. Esa es la historia que te daría si le preguntases, ahora mismo se encontraba combatiendo contra un peligroso enemigo. Sacando de su bolsillo a su sidekick, Máximo, se lo hace saber. "¡¿te das cuenta, Máximo?!" Mira a los lados con los ojos antes de volver a rodar por el piso, desplazándose hasta una caja que había cerca para ocultarse, asomando sólo su cabeza... y también la cabeza de Máximo, a quien con la mano hace monitorear el lugar como si mirara alrededor. >Máximo "¿D-de qué hablas, supergirl?" Máximo tiene una voz realmente parecida a la de Lila. Esto se debe a sus habilidades de ventriloquia. >Lila "¡Un malvado con superpoderes está subiendo el calor!" >Máximo "¡Oh por Dios!, ¿y qué haremos?" >Lila "Tenemos que mantenernos en la sombra... el monstruo de hielo (aire acondicionado) fue sellado por señor padre... ¡si el sol nos toca moriremos!, eso es lo que enferma a los osos polares..." >Máximo "Bien... bien..." >Lila "¡HIYA!" Lila da otro giro por el suelo, acercándose a la moto de señor padre, en la que recarga la espalda, oculta. "Rosinante... que gusto encontrarte, mi fiel corcel. Pero no tengo tiempo para hablar... ¡tengo que prepararme para la aventura!" Lila se echa cuerpo a tierra aprovechando que la caja de herramientas andaba juntito a la moto, para así hurgar en la caja de herramientas, sacando un taladro. "¡Jaja! Mi arma secreta. El gigataladro rompedor." *bzzzz* *bzzz* "bzzzz bzzz" Lo hace girar un poco a la par imita su sonido con la boca. "¡Acabaré con este calor antes de comer, papá-man!"

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Entonces, un ruido ensordecedor le eriza la piel, un eco ininteligible que sobresalta incluso a la heroína. Sus ojos, abiertos de par en par. Su cabello, parado como si fueran las orejas de un animal alerta. "¡!¡!¡!¡!¡!" Mira hacia afuera. "¡¿qué es eso?!" Corre al exterior con Máximo en una mano y el taladro en la otra, derrapa en la acera y mira la furgoneta avanzar por la calle con sus enormes ojos brillantes bien abiertos. *resuello* Su imaginación activa actúa, en la calle no hay una furgoneta hecha chatarra arrastrándose por la vida para comprar cosas, no... ¡era un precioso lipizzano mecánico salvaje, esperando ser domado y reparado por la super niña del taller! "Tengo que hacerlo, Máximo. Tengo que domar a ese corcel." >Máximo "Ten cuidado, supergirl... ¡se ve muy salvaje!" >Lila "¡No importa! Tengo mi taladro, y te tengo a ti... ¡Estoy lista!" -exclama- "¡AAAAHHHH!" Con los brazos en el aire, manteniendo el taladro girando, la heroína temeraria corre contra la furgoneta olvidando su anterior aventura con el fin de saltar sobre su capó y aferrarse a este para domar al caballo. "¡Te tengo! ¡Te mostraré mis habilidades!" Diría si lo logra para luego tomar el taladro y hacerlo girar. "¡Hiyaaa!" Procede a taladrar el capó. 1d100 = 31

>>103649 (Estuve un rato dándole vueltas a ver qué se me podía ocurrir para antes de llegar a Midgard, pero honestamente no se me ocurrió nada kek, pero más adelante se me ocurrirá de seguro algo) >>103649 Capitulo 1: Nuevas Andanzas ¿Cuánto habías caminado ya?... ¿Cuánto habías recorrido, cabalgado, e incluso tenido que nadar desde las estepas, en dirección hacia el oeste?... Las enormes montañas, que suelen dividir el continente, con aquellas muy lejanas tierras nevadas, a duras penas y se lograban observar para ese punto, y las estepas, ya solamente eran un mero recuerdo en tu imaginación para aquellos momentos... Caravanas habían ido y venido, mercaderes, viajeros de todas partes, inclusive alguno que otro con pintas de enano y de paso malintencionado, se habían cruzado en tu camino, y tal como habían pasado, se habían ido... El viaje, aunque acompañado, había resultado algo solitario, pero, todo lo que fuera con tal y le llegases siquiera a los talones a "El Oscuro", de seguro valdría la pena... La última reunión entre ambos, termino con un agridulce despido entre ambos, casi como el de un padre dejando ir a su hija, más... Había algo que... Tal vez no encajaba de a mucho durante aquella despedida... ¿Había Sido ideas tuyas o... A aquel fiero guerrero, frío como la nieve y duro como la piedra, le habías alcanzado a ver la mirada rompiendosele por, al menos, un instante?... Quien sabe, la mente hace jugarretas cada cuando después de todo, si no, no te hubiesen despedido con unas cuantas copas y un banquete. Las tierras que caminabas, antaño, e incluso ahora, habían Sido sacudidas por la guerra: Tensiones y luchas de poder entre los diversos reinos y señores que habitaban el continente, una casa con nombre más complicado que la anterior, y aún así... Aquel camino que recorrias a pie en aquel momento, pues tú caballo salió despavorido hacia 2 días atrás... Era demasiado calmo, no habían ni siquiera bandidos a pesar de la frondosidad de los bosques que te rodeaban y ocultaban los rayos del sol... Siguiendo tu camino, en un pequeño claro, una no muy grande aldea se divisaba a menos de 10 minutos de dónde te encontrabas, más no había humareda alguna saliendo a través de las chimeneas de las casas, o chiquillos jugando en las calles de la plazuela, más si había unos cuantos corderos detrás de una de las chozas cercanas a una iglesia... Quizás no era mal lugar para sentarse un rato a descansar, después de todo, a juzgar por el sol, dentro de un rato empezaría a esconderse y a bajar. >>103657 (Iba a preguntarte si preferidas algún prólogo o comenzar de una vez, pero, viendo la historia de tu personaje, un prólogo sería remontarse hasta hace muchísimo tiempo atrás, cuando todavía eran nobles kek, pero está bien). Capitulo 1: El Desdichado noble La vida si que había Sido dura contigo, ¿No?: El honor de tu apellido, aquellas vastas tierras dónde andabas a caballo, tus antiguos criados que, a saber siquiera si seguirán vivos o no, o como trofeo de algunas de las víboras de la nobleza, tus finos juguetes en manos de algún cochambroso mocoso... En especial, la fortuna que nunca lograste disfrutar debidamente, y todo al drenaje por tus abuelos y padre con sus fiestas, banquetes, financiamiento a ruines campañas por meros favores políticos a gentuza que no contaba con honor en su palabra... Si tan solo pudieras ir al pasado, de seguro que tomarías el asunto en tus propias manos, incluso si tú propia vista ni por asomo te lo permitía, pero... Es mil y una veces mejor dormir en tu propia cama de seda, a seguir viviendo en aquella taberna, alquilando una habitación desde hace un par de meses atrás, gracias a un favor con el dueño para que no delatases a los guardias acerca de su comercio inescrupuloso de sustancias extranjeras... Y unas monedas, claro está. Hoy el día estaba bastante lento, las primeras rondas las pagaba la casa, y todavía estabas allí con la primera jarra para evitar no llegar a más de 5, y que el tabernero empezase a cobrar. Tal vez habría que ir a otro lado, pareciera que todo el que llegaba a la ciudad, únicamente iba a la taberna para trabajar como guardaespaldas, o hacerse el interesante, o incluso captar la atención de algún tipejo y jugar al aventurero... ¡Para aquellos seres esos eran meros juegos, pero para ti significaba si podías comer bien, o tener que comer sobras, Santo cielo!... Aquellos niñatos... Los pocos interesados que buscaban personas, ya habían Sido abordados por una pequeña banda de chiquillos que,.prácticamente regalaban su trabajo, con tal y de jugar a ser caballeritos, y los otros, se iban a poner sus trabajos directamente en el gremio de aventureros, pues, aunque más caro, supuestamente era más... "Confiable" el personal de alli... Meras patrañas... La cerveza al menos estaba bien tras un par de tragos... Tal vez eran las especias orientales, la que le daban ese toque... Al menos sigue llegando gente con el pasar del día... Una mujer que atrajo las miradas de medio bar... Un tipo con pintas de mendigo... Un hombre de tez morena también entró, y no tiene un brazo... Un muchacho también entró... Por si acaso, si, puedes hablar con cualquiera, a ver si tienen alguna misión kek, solo que no tengo casi espacio para las picas. Dependiendo de quién elijas, posteo su pic en el siguiente turno >>103660 >Esos dados Acabo más rápido de lo que creí kek (Abre última pic si cuando te diga) Una aventura llamaba a la puerta de tu casa, una aventura para domar a aquel corcel de horrendos alaridos siendo domado por un ogro feo y gordo, con cara de pocos amigos, seguramente venido desde Mordor o incluso peor bolivia o peru, y a aquel pobre corcel lo hacía relinchar con su feo lenguaje ininteligible... Tenías que hacerlo... ¡Usando todo tu poder, te lanzaste de inmediato contra aquel horrendo ser, a fin de quitarle su montura! ¡Tu gigataladro en mano, listo para perforar los cielos y más allá como nunca nadie antes lo había visto! ¡Solo eras tú contra aquel corcel y ogro, a quien tomaste desprovisto! ¡Un salto y ataque por sorpresa que-!... ... ... ... ...¿Que paso?... ¿Por qué todo se torno de blanco?... ¿Y el taladro?... Jurarías que tenías el taladro en tus manos, y aquel taladro justo impacto contra aquel corcel... ¿En dónde estabas siquiera?... Estabas de pie, claro estabas, en una habitacion completamente blanca, tanto que hasta hacia que te dolieran los ojos, Máximo no parecía estar contigo en ningún lado, y lo único que se escuchaba, eran tus pasos al caminar...

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Una especie de escalera apareció en medio del todo, un poco más adelante de ti, y al mismo tiempo en que aquella escalera aparecio, una extraña mujer yacia sentada también, todo en cuestión de meros segundos, si no es que milésimas, un mero parpadeo y aquello se materializó (Puedes abrir ahora sí pic) >? "Huuuuuu... *Tsk* *tsk* *tsk*... Pobre criaturita..." Un par de hojas hacían en sus manos, e intercalaba la vista de las hojas con tu persona. >? "Por suerte no dolió mucho, fue en el acto... Aún así, que feo fue ese accidente" ...¿Accidente? La mujer se levantaba poco después, retumbando el sonido de sus tacones por todo aquel... Salon, si es que se le podía llamar así, y estando delante tuya, puso una mano en su pecho. >? "Sería muy muy cruel que una vida tan joven acabase en este mismo instante, sin siquiera una oportunidad para que pudiese vivirla a plenitud, ¿A qué si?". Sonrió un poco, y después asintió levemente >? "¿Que te parece... Una segunda oportunidad para vivir?... No en ti antiguo hogar, eso es seguro, y... Muy difícil de lograr... Pero si en un sitio al que puedas llamar hogar, y un sitio donde todas aquellas fantasías en tu cabeza, puedan hacerse realidad" ...¿Quien o que era aquella tipa, para empezar?... Y cuando quitaba su mano de su pecho, una esfera, tal como la tierra, aparecía. >? "Un nuevo mundo, con Miles y Miles de aventuras... Y una nueva vida... Es eso, o descansar eternamente..."

>>103671 >meses, años. Casi diez, nueve u ocho años de peregrinación en tierras extranjeras, aprendiendo, viendo y viviendo como puede, leyendo los manuscritos de los maestros marciales de estas tierras y aprendiendo de la estrategia bélica local cuando se mete de mercenario en algún encuentro... Bueno, no tan local al esta haber pasado por demasiadas tierras, tierras en constante conflicto por alguna razón que no termina de comprender del todo. Los suyos luchaban por un bien, pero esto de peleas entre reyes y señores lo ve absurdo, sacrificando levas sin razón. Al final del día siguen siendo guerras donde la muerte es el rey y ella como mercenario se alimenta de él. (Al parecer nosotros mismos somos la guerra, ni siquiera la vida inferior se salva de la sangre.) >recuerda por unos momentos las guerras entre hormigas que miraba y provocaba cuando era niña y no tenía nada que hacer, después de todo la aldea era aburrida, sin chiste. Tal vez por eso se fue con La Horda cuando tuvo oportunidad, maravillada desde niña por los tambores del conflicto y la muerte. (La violencia vive en nosotros, alimentándonos de otros para seguir existiendo y continuar con la rueda violenta.) >la falta de sustento ya la está haciendo filosofar de más, demasiada lectura de Artistotéles y demás exponentes del medio. Se ha dejado mucho sueldo en manuscritos y hasta ha robado en iglesias y demás, negándole el perdón de los dioses por semejantes atrocidades. >sus pies desnudos y repletos de callos caminan por la tierra, guiados por el palo del mayal que utiliza como bastón y además le sirve para llevar su abrigo que por suerte no le han robado. Ese tipo enano y narigón con el que viajó desde que se quedó sin caballo al final era un embaucador que le robó mientras dormía todo su equipo; armas, mochila, comida, dinero, campamento, manuscritos, recuerdos, todo, TODO. (No puedes confiar en los enanos de nariz grande.) >lo que más pesa son las armas, armas que ha ido recogiendo a lo largo de su travesía cuando mataba a alguien. Cosas de creencias en su tribu, al parecer el alma del guerrero se queda atrapada en el arma que usó antes de morir y el que la tenga luego tendrá su poder o algo parecido, no recuerda muy bien lo que dijo su padre, aunque recuerda que esa es la razón por la que se heredaban los arcos de caza. >su mente pasa al dolor de sus pies y al hambre en su estómago rugiente, luego por alguna razón hacia el pasado. Recuerda a su amigo fiel, un bactriano llamado Camo que la acompañó por un buen rato en su peregrinación... Hasta que tuvo que comérselo y secar la carne restante, también haciéndose un abrigo con la piel para aguantar el frío de las tierras congeladas. Hay que ser demasiado fuerte para ser un superviviente, a veces hay que tomar las decisiones más difíciles. Lo siento, Camo. >su cabeza va hacia más atrás, cuando decidió dejar todo detrás para salir más allá de la estepa. Todavía lo recuerda con lujo y detalle, esa última fiesta en el campamento central y no hecha por una victoria o algo así, sino para ella y solo ella, sacrificando y comiendo hasta treinta corderos. Un gran hombre el Kan, hasta respetaba a los muertos, mandando a enterrar hasta a sus enemigos por simple honor y no por otra cosa. La perfecta armonía entre lo fiero y la bondad, peleando por la libertad. ... >el recuerdo de su despedida, de esos ojos le destroza el alma en estos momentos tan difíciles, un momento de flaqueza. No puede evitar echar lágrimas mientras camina hacia donde sea que esté caminando en esta tierra desconocida. ¿Ha valido la pena irse del lado de su gente? ¿Valió la pena irse de su lado? https://youtu.be/iqkQRgGdAPo?si=joQ5uc1EHX98lxse >de inmediato se planta en el lugar y observa el bosque como si hubiera sido ajeno a él toda la caminata. Es... es una hermosa vista verde y sus pulmones se llenan de él, sus ojos bañados por la luz solar que apenas se cuela por las hojas. Ahora lo entiende. Los dedos de sus pies pellizcan la tierra y hierba y sus ojos se cierran lentamente para dejar pasar una oscuridad pacífica. El viento cantante entre las maderas de los árboles mueve su cabello y seca sus lágrimas cual madre consolando a su hijo que se cayó y raspó la rodilla. ... >hace mucho tiempo que no sentía el cariño de la Pachamama madre natura, y este sentimiento pacífico se lleva toda duda en su mente. La madre que quita, aprieta, pero también da, solamente que muy pocos la escuchan cantar. Siempre va a estar ahí para la violencia y para la bondad, después de todo eso es lo que somos. Gracias. >agradece y sus ojos se abren. Si algún bandido la está siguiendo ya se puede ir haciendo a la idea que la mujer está loca. Igualmente prosigue su caminar sin botas al haber sido robadas por un malviviente. > > > >la viajera pronto se alegra al divisar una pequeña aldea no muy lejana en este claro perfecto, y aunque tenga hambre y no pueda pensar bien, su cabeza se empieza a mover hacia las preguntas. De momento no ve a nadie en los alrededores y las chimeneas están limpias de humo, cosa extraña ya que se mantienen prendidas para hacer calor y preparar comida, ¿no? Lo único con vida que observa son esos corderos detrás de una casa. (¿Dónde están todos? ¿La iglesia?) >la extrañeza se le va un poco, es algo lógico que quizás estén en ese edificio rezando a sus deidades, aun así camina con cautela hacia la aldea. El sol pronto se va a esconder y no tiene campamento, tampoco quiere vagar de más por el bosque. >>103657 >>103660 Kekeo

>>103651 >Observe el santuario soltando un suspiro. Los templos nunca habian estado así, ni siquiera en las historias que contaban los ancianos. Pero... ¿por qué esto pasaba ahora? Por más que los ancianos se esforzaban, ni rituales ni oraciones han podido devolver la paz que antes sentíamos... creo. >Mis pensamientos son interrumpidos cuando notaria algo al borde del santuario. O más bien a alguien. Estaba silencio, observando desde hace rato, sin atreverse a acercarse. >Deje de limpiar y solte el trapo en el suelo. — ¡Oye tu! ¡Identificate! ¿Amigo o enemigo? Espero no moleste el turno corto

>>103671 ¿con mejores dados si le ganaba al auto? Kek >Lila Un salvaje corcel de hierro recorría la calle, esperando a ser domado por un digno jinete como ella, ¡y así iba a ser! Grito de guerra, alarido del gigataladro, cuando estaba a un tiro de piedra del vehículo, ¡Lila saltó con decisión como pirata abordando una nueva nave y! ...¿qué pashó? pic 2 "..." Lila, de lo más confundida, miró para todos lados. Su manita vacía, su otra manita, también vacía. ¿Su alrededor? Cegador. "Mrrm" Hace sombra con una mano, la habitación estaba demasiado iluminada, y Lila demasiado confundida. Mira alrededor con los ojitos. "¡¿Máximo?! ¡haz una voltereta mortal requetetriple si me oyes!" Pero nadie hizo una voltereta mortal requetetriple. Lila frunce el ceño. "Grr... ¡me separaron de Máximo y del gigataladro!" -...- Deja de fruncir el ceño, volviendo a confundirse. "Espera, ¿dónde estoy?" -mira a los lados otra vez sin encontrar nada- "¿HOLAAAAA?, ¿ALÓOOOO?, ¿GESUNDHEIT?" Lila comienza a caminar exclamando saludos y esperando una respuesta que no llega. En un momento, finalmente halla algo, unas escaleras que empiezan a sus pies, confundida, mira el primer escalón un rato antes de levantar la vista para ver el resto. "¿uh?" Lila parpadeó varias veces confundida, y entre uno de esos pestañeos, se manifestó la figura de una mujer sentada en la escalera. <Huuuuuu... *Tsk* *tsk* *tsk*... Pobre criaturita... "..." Lila parpadea un par de veces otra vez, aún confundida. Mira a los lados, y se apunta a sí misma. "¿Yo?" -sí- "¡JA!, ¡Yo soy una superheroína, no una criaturita! ¡¿oh?!" Las hojas roban instantáneamente toda la atención de la pequeña, que corre a ver. "¡¿queseso queseso queseso?!" Parada atrás de la mujer, Lila mira la hoja desde todos los ángulos posibles: desde el hombro izquierdo, el derecho, por sobre la cabeza de la chica -rodeando la nuca de la mujer con las piernas- con pura emoción hasta que ve que es. "Buuuh no tiene dibujitos..." Se deja caer.

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"Uy au oy" Rueda un par de escalones hasta el suelo otra vez. Donde se queda boca arriba con los brazos y piernas extendidos, como al hacer ángeles de nieve. <Por suerte no dolió mucho, fue en el acto... Aún así, que feo fue ese accidente "¡A mí nada me lastima!" -dice levantándose de un salto... aunque recién exclamó de dolor- "¿qué accidente?, ¿el que me dio mis poderes? ¡los desechos radiactivos no son nada!" -se sobresalta resollando- "¡¿OH?!, ¡¿PAPÁ ME DARÁ EL SIDEKICK QUE LE PEDÍ?!" Lila fue un accidente, eso le dijeron. ¡Si papá tenía otro accidente tendría un sidekick perfecto! La mujer se paró frente a ella. Lo enana que quedaba Lila en comparación era vergonzoso. ¡pero no importa porque Supergirl tiene más músculo! -no en realidad- <Sería muy muy cruel que una vida tan joven acabase en este mismo instante, sin siquiera una oportunidad para que pudiese vivirla a plenitud, ¿A qué si? "..." -Lila la miró con un rostro neutral- "¿eres un ángel?" Sus capacidades diferentes la ayudan a llegar a tal conclusión. Al parecer, estaba frente a un ángel, lo bueno de esto es que, como una niñita pequeña dulce e inocente al máximo, acabó aquí y no abajo. <¿Que te parece... Una segunda oportunidad para vivir?... "Me mató el sol, ¿no? Hibernaderus ganó..." <si en un sitio al que puedas llamar hogar, y un sitio donde todas aquellas fantasías en tu cabeza, puedan hacerse realidad "¿Eh?, ¿fantasías en mi cabeza?" -mira a los lados- "¿Máximo está ahí?" <Un nuevo mundo, con Miles y Miles de aventuras... Y una nueva vida... Es eso, o descansar eternamente... "Waahh" -suelta, maravillada por tener el mundo frente a ella- "tocar." -toca un lugar de ese planeta con el dedo- Luego levanta la mirada, emocionada. "¡Quiero la aventura, quiero tener mil aventuras! ¡no quiero descansar, quiero ser la heroína!" -exclama, ama esta idea- si te pones a pensar, pues qué horrible que se te muera tu niña ultra autista por descuidarla dos segundos keksito

>>103671 >La picazón en mi espalda era tormento sin fin. Poco valían mis uñas, pues cuanto más rascaba, más ardía la maldita comezón. Bien sabía yo la causa de semejante infortunio... aquellas viles sábanas raídas y el colchón de paja mohosa. Una camada entera de acáridos chupasangre debía de habitar allí, criaturas despreciables que pululan entre los mugrosos hilos de este desdichado aposento, piojos, pulgas y ácaros!. ¡Ayyyyyyy, pero qué crimen he cometido para merecer este castigo divino! No hace tanto reposaba en mis sagradas, pulcras y finas sábanas de seda exquisitas, en colchones tan altos y suaves como las nubes del cielo. Y miradme ahora, varado en esta cueva rústica y desalmada, durmiendo entre esos trapos ruines a los que tienen el descaro de llamar “cama.” >Dios, si acaso vive, bien puede haberse olvidado de mí, como quien abandona al azar el destino de las moscas en la caca. Mi rostro reposaba mustio en la desgastada mesa de esta taberna, mi jarra de cerveza medio vacía en mano y la sombra de la tristeza en mi semblante. O al menos, me esforzaba en ocultarla para no aparecer débil ante el gentío. Más la verdad es que mi espíritu estaba herido de muerte, y en cada sorbo de esta bebida barata resuenan en mi mente los ecos de aquella pregunta que me hago todas las noches "¿por qué yo? ¿Qué pecado he cometido, yo que tan solo vine al mundo como el último de mi linaje?" "buahh" >Con un suspiro desganado, agoté el poco licor que restaba en la jarra y la estampé contra la mesa con fuerza, secándome la espuma de la barba descuidada que me acompañaba hacía días. Oh, cómo añoro aquellos días de infancia, cuando los Hohenhalm eran todavía una casa de renombre, libres de deudas y males, antes de que generaciones de parientes imprudentes nos dejaran en esta ruina absoluta. Ahora, cada susurro y murmullo en el pueblo repite el mismo mote... “El último Hohenhalm… tan ruin como el peor de los plebeyos.” >Me digo a mí mismo con un tono melancólico y satírico. Y allí, sin una moneda digna en los bolsillos, maldigo mi suerte. Los niñatos moquientos y malolientos que se hacían llamar “aventureros” ofrecen sus servicios por nada, y el pomposo Gremio de Aventureros, con su nombre rimbombante y sus contratos generosos, acapara los trabajos. ¿Por qué no me inscribo yo también, preguntáis? Ahhhhh, la vergüenza. La vergüenza de que el nombre Hohenhalm se vea registrado entre tantos otros nombres honorables, solo para convertirse en un chiste, una sátira. ¡Oh, desdicha!!, Ayyy porque me persigue la desgracia... >Y aquí estoy, perdiendo mi dignidad y paladeando esta cerveza de orines de rata y cebada marchita como si fuera una obra de alta culinaria. No tengo nada más que mi fiel ballesta.... ni tierras, ni familia, ni riquezas, ni renombre, ni seres queridos, ni honor o prestigio… tan solo mi ballesta y sus virotes, que, en estos tiempos, tienen más valor que mi propia vida, y es mi único método de sustento. "¡oh!" >Entonces tras el trascurso del tiempo, la espera me trae novedad. Tres figuras acaban de cruzar el umbral de esta mugrienta taberna, una dama, un mendigo que parece haber conocido la desdicha aún más que yo, y un viajero de tierras cálidas, a juzgar por su pigmentación de maldad. Mis ojos brillaron al instante formando el símbolo del dinero, y en mi rostro cansado se esbozó una sonrisa torcida, ¡trabajo, al fin! >Sin duda la dama será la primera en ser abordada rápidamente, por varios ansiosos por trabajos, pajeros y por algún aventurero más joven y atractivo, pero el mendigo… ah, ese pobre diablo no encontrará alguien que lo sirviera ¿no? A excepción de, yo, el último caballero de los Hohenhalm, me le acerco con mi oferta de servicio. Al menos sé que no tendría competencia si voy a ofrecer mis servicio con el mendigo. >Me acerco al mendigo con paso solemne, enderezando la espalda y dándome aires de nobleza, mientras mis ropas gastadas y mi barba desaliñada apenas sostenían el peso de mi pretendida dignidad. Al llegar junto al mendigo, me inclinó ligeramente, como si dirigiera una reverencia a un noble compañero de infortunio. "¡Bien os saludo, buen hombre! Permítame presentarme... Kokolizo Ludovico, ᵈᵉ ˡᵃ ᶦˡᵘˢᵗʳᵉ ʸ ⁿᵒᵇˡᵉ ᶜᵃˢᵃ ᵛᵒⁿ ᴴᵒʰᵉⁿʰᵃˡᵐ..." >dije las últimas palabras de prisa, casi tragándome las sílabas "spspsps", esperando que la mención de mi apellido pasara desapercibida. "Ahora bien, ¿Anda en busca de servicio de aventureros, guardianes o escoltas? Permitidme deciros que, aunque mis hazañas puedan no ser conocidas en estos lares, mi brazo es fuerte y mi ballesta, si bien caprichosa, leal a su dueño." >Hice una pausa teatral, golpeándome con suavidad el pecho como si reafirmara mis palabras con el peso de mi honor. "Así pues, os ofrezco mis servicios como protector, guardián, y caballero al fiel servicio de vuestra seguridad y bienestar. Con un módico acuerdo" "Podré aseguraros que, si bien el destino pueda jugar sus bromas, ninguno cruzará vuestro camino sin antes encontrar mi… destreza." "...." >Tal vez, por este dia, el honor perdido puede esperar un poco más.

>>103692 <Mientras Tanto en el mundo mortal https://youtu.be/5dvNOeBHtgE En cualquier minutoarrancaba el partido, y yo estaba listo pa' verlo como un campeón. Era un clásico, Los bosteros Boliguayos de Boquita contra los mismisimos de RIVEEEER!. Tenía todo lo necesario, Fernesito bien frío, el plasma (ese que me compré en cuotas eternas), el sinllonsito ahí pa' tirarme como un rey, y el ventilador, que con el calor que hacía, era sagrado. Lo prendo y... Rutruturrtu...pafff. "Qué raro", pienso. Le doy otra vez al botón y… Rutruturrtu...pafff. Nada, el ventilador se me clavó justo ahora. "==Lilaaaaa!" la puta madre carajo" "La pendeja me cagó el venti" Ya la veía a la nena tocando todo y rompiendo, pero no había tiempo para lamentarse. Caso la moto, la fiable y hermosa Winner 4tc huesificada, mi "Corcel de Trabestis" como le digo de cariño. Arranco *Fum fum fum fumfum* y me mando directo a la ferretería, medio rezando para llegar rápido y no perderme el partido. Esquivo dos camiones, un par de motochorros que me miran fijo, y una jauría de perros que no sé de dónde salió. Llego a la "Casa de Tuercas y Más Tornillerías", entro medio transpirado y sin tiempo que perder. Me paro frente al mostrador y le suelto al chabón "Me da' uno de esos cosos del cosito que hace 'tiki tiki', con forma de cruz, pa' clavar la cosa esa del cosote, ¿me entendes?" El tipo me mira con cara de "¿qué está diciendo este?", pero igual me da el repuesto. Le explico: "Es que el venti no tira más, bocha de calor hace y como que no tranca, ¿viste?" El tipo me lo alcanza sin decir mucho. "¿Cómo lo cambio?", le pregunto, que yo con estas cosas ni idea. "Es fácil" me dice él "movés la perilla, sacás lo roto, ponés el repuesto y listo." "¿Aceptás tarjeta?" le pregunto, medio esperanzado. "Nah, taca taca, efectivo nomás," me suelta. Le doy 40 pesos y me tira 20 de vuelto. "Pará, capo," le digo, "tenías que darme 30." Y ahí empieza el tipo con que si el IVA, que si esto, que si aquello, y yo pensando "dejate de joder, no me querés devolver los 10 pesos". "¿Veinte? ¿De dónde sacaste eso?" "Si no te gusta, fiu fiu, te podés ir" me dice, todo sobrador. Y ahí, hermano, no me aguanté. Le mando un PIM, piña directa a la cara. El tipo se va de culo contra el suelo y empezamos, que PIM, que PAM, que PUM, uno tras otro. Le doy en la napia, lo agarro de la nuca y lo sacudo contra el mostrador PAMPAMPAM. Termino de dejarlo ahí mareado, agarro el vuelto y fiu fiu, me las pico antes de que se despierte del todo. Subo a la moto y veo la hora "¡La puta madre!" El partido ya había empezado. Salgo volando, pero me acuerdo de la enana, la pobre ahí en casa aguantando el calor. Así que me desvío un toque, paso por el kiosco y le compro una coquita de tres litros bien helada, para que la bendi no me odie tanto después de todo. https://youtu.be/avZSEluRlIA Ya con los recambios del Ventilador en una mano y la coquita fría en la otra, subo a la moto, apretando los dientes y acelerando para no perderme el partido mas de lo que ya me lo perdi, con el asiento viejo y destartalado con las marcas de mis nalgas ya tatuadas en su cuero sintetico. Mientras vuelo por la calle llena de pozos y charcos. El viento me choca y me levanta los pelos de los brazos, el sol me quema la nuca, y siento el corazón latiendo fuerte, rojo y caliente como mi cara. Ya me veo llegando a casa, listo para arreglar el ventilador y darle la coquita a mi diablita. Pero a medida que me acerco, empiezo a escuchar las sirenas de la shuta y las ambulancias. Me sacude una sensación rara, una espina en el pecho que me incomoda. Doblo la esquina y veo a la Gorda Silvia, parada con las manos tapándose la boca, pálida y con la mirada perdida. Está mirando hacia mi casa. Me acerco y le grito

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"¿Qué pasó, Gorda?" La Gorda me mira, temblando, y me dice, "Don Ramón, ¡no sabe lo que pasó… La Lila!" No llega a terminar la frase que un escalofrío me cruza de pies a cabeza, un pánico que nunca había sentido. Meto puño a fondo y salgo disparado. Ni pienso, ni respiro. Lo único que siento es un frío que se mete hasta el pecho, ahogándome. El partido ya ni me importa, me parece una estupidez pensar en el fernet o el ventilador. Todo pierde sentido, menos la preocupación que crece con cada golpe del motor. Las sirenas de los milicos y las ambulancias suenan cada vez más fuerte. Entonces, cuando llego, lo veo: mi casa rodeada de gente y policías. Freno de golpe, el pie resbala, la moto se tambalea y salgo volando; caigo de costado, pero ni me duele, ni me detengo. Me levanto y la moto se sigue deslizando, girando y haciéndose pedazos contra unas papeleras. Pero yo no miro atrás, corro directo a la multitud, que me bloquea el paso. "¡Sálgan de ahí, carajo!" grito, empujando a la gente, apartando a cualquiera que esté en el medio. Alcanzo a un policía, lo aparto también, y entonces la veo. Es mi nenita, mi Lila, tendida en el suelo, inmóvil, con los ojos cerrados. Todo se me rompe adentro, el alma se me desploma y caigo de rodillas. Mi vista se nubla, las lágrimas empiezan a correr solas y la garganta se me cierra mientras le grito, con la voz quebrada. "¡LILAAAAA!" Corro hacia ella, la agarro, la abrazo fuerte, acunándola como si pudiera devolverle el calor que ya no tiene. La miro, la toco, le limpio la carita manchada de sangre con mi gorra azul de pescador, tratando de secarla, de revivirla, de que vuelva a mirarme. "Mi nenita, mi chiquita… ¿por qué? ¿POR QUÉEEE?" Mi cuerpo entero tiembla mientras la aprieto contra mí. La gente de la vecindad me mira, la policía intenta separarnos, pero yo no la suelto. Es mi nena, es mi princesa, mi bendición, lo único que tenía. Siento cómo la vida se me escurre entre las manos, cómo el mundo se hace polvo y se desvanece con cada segundo que pasa y ella no se mueve. No escucho nada, no veo nada, sólo siento el vacío, la pérdida, la oscuridad, mientras abrazo lo único que importaba y que ahora se fue para siempre. "Si su ángel de la guarda me escucha, cuida de ella y hazla todo lo feliz que yo nunca pude... mi piojita..."

>>103698 Ayyyyy kekié

>>103678 >>103689 >>103692 >>103693 Respondiendo, lamento no aparecer ayer, trámites y demases. >>103692 >El spoiler El taladro se hubiera llevado todo el golpe como mínimo kek, pero tal vez. >>103698 Na increíble, mis costillas salieron volando, 10 puntos y reco maquinola pero ya en serio, me hizo cagar de la risa un buen

La concha de mi madre, no me he lolmuerto, perdón, no he tenido tiempo estos días, si no es hoy, más tardar mañana salen los turnos

>>103698 Kekazo. 100% seguro de que es algo que pasaría en Argentina. >>103807 Chill

>>103807 No, OP. Te tardaste demasiado, ya no quiero participar. broma kek. Ta bien OP

>>103678 Llegando a la aldea, el camino empezaba a contar con un pequeño empedrado, por dónde era relativamente más cómodo para las carreras y animales de arreo poder pasar, dandote prácticamente la bienvenida el mero resoplar del viento en tu rostro. Aún a pesar de que la noche se avecinaba, no se escuchaban siquiera las voces de los niños al correr por un lado y por otro, a duras penas se escuchaban a los corderos cuando les picaba por balear osea cuando dicen "Bee". Un par de casas se encontraban con sus puertas cerradas, pero las ventanas cubiertas, y, había otra, cuya puerta parecía haber Sido destrozada con algo pesado, quedando a tan duras penas parte de esta y de su marco, más no había más rastros o señales de violencia adentro de esta... Una chimenea en otra casa, había Sido completamente tapada, y en lo que parecían ser las caballerizas, lamentablemente, no se encontraba caballo alguno, que no fuera una vieja carreta sin una rueda. En medio del pueblo, se hayaba un pozo de piedra, cuya cubeta no se encontraba, y su cuerda estaba firmemente atada hacia un robusto palo de madera, y hacia su pequeño techo, pero con un vistazo hacia el fondo, tampoco parecía que hubiera demasiada agua ahi dentro, si es que siquiera había algo y tus ojos no te estaban engañando. Aún con todo aquello, en todo el frente dónde aquellas corderos rebuznaban y baleaban, un pequeño local mantenía sus puertas abiertas... Aunque en este caso, se podría decir que "Entre Abiertas", y una tenue luz salía desde el interior del pequeño local... Y desde aquella última casa, un pequeño golpeteo se alcanzaba a escuchar, un golpeteo que hacía que aquellos dóciles animales se sobresaltasen, y empezase a balear más fuerte, yéndose hacia la cerca que les mantenía encerrados... Era... Algo pesado, era acero, o mínimo hierro siendo golpeado. Siguiendo el camino, la iglesia mantenía sus puertas a duras penas abiertas, más de la misma, una extraña oscuridad emanaba, que apenas y lograba ser contrarrestada por unos cuantos velones, cuyas tenues luces hacían lo posible por iluminar aquella no muy antigua iglesia, cuyos vitrales, habían Sido destrozados en parte... Aún con todo y todo... No había señal alguna de que aquella aldea hubiera Sido algún campo de batalla, o que algún ejército hubiese llegado a pillar y destrozar... Al pasar hacia adentro de la iglesia, te topabas con una buena cantidad de asientos de madera completamente vacíos, que formaban un pequeño pasillo hasta el otro lado de la iglesia, dónde un pequeño pedestal de madera se alzaba un poco más alto, y dónde seguramente el predicador de turno daba los sermones de cada mañana... Sin embargo, tal cosa se encontraba vacía también, y el velero que debería acompañar al pedestal, estaba a punto de extinguirse su luz. Únicamente un tipo se encontraba en aquel lugar, sentado hacia el frente, arrodillado, por supuesto, dando sus plegarias hacia su santísima deidad, y este mismo, vestía con ropas algo desgarbadas. Tus pasos, sin embargo, retumbaban en aquel piso de piedra, a lo cual el tipo se quedaba paralizado, solamente volteandose muy lento para verte, a lo cual, se sobresaltaba, poniéndose de pie, y dando unos pasos hacia atrás. >? "¡!" "¡¿Q-Quien es usted?! ¡A-Aca no hay nada más! ¡Lo juro!" ...A saber a qué se estaba refiriendo.

>>103689 No hay problema Con todos aquellos actos raros en los santuarios, era normal estar un tanto paranoica, y más con aquella extraña vieja que lo único que hacía era... Mirar, ni siquiera entraba, solo estaba ahí... Mirando, y con sus manos juntas, como si estuviera en plegaria... ¡Pero es que no siquiera movía su boca o algo!. Aún con todo y que le gritabas y le hacías identificarse... La vieja ni se inmutaba, más bien te sonreia, y después negaba con su cabeza >? "Uy uy uy, ¿Que pasa con estos muchachitos de hoy en día?... Las sacerdotisas en mi época, eran mucho mucho más respetuosas con los ancianos, incluso les invitaban a pasar adelante" ...Eso no respondía ninguna de tus preguntas. >? "Muchachita, si eres la sacerdotisa de este lugar sagrado, debes aprender primero a comportarte, a tener modales, es de muy mala educación gritarle de esa forma a una señora mayor, y más a alguien que viene a pedir por el alma de su esposo" La vieja cerraba por un momento los ojos, negando de vuelta con su cabeza, pero esta vez, soltaba sus manos al menos. >? "Me llamo Komi, y con su debido permiso y respeto, voy a pasar" Y como todo viejo necio, la tipa entraba, pasandote por el lado, sin siquiera voltear a verte. Un clinclineo se hacía presente, no obstante, puesto que en una de sus manos, cargaba una bolsita, a saber con qué cosas metálicas adentro de ella. >Komo "¡En mis tiempos había más respeto por los ancianos y por las personas! ¡Los creyentes y feligreses no eran tomados como enemigos ni mucho menos!... Me encontraba pidiendo los debidos permisos a los antiguos espíritus para poder entrar a este sagrado santuario... ¡De paso está sucio! ¡Que vergüenza! ¡Muy seguramente la sacerdotisa Kuromi no hubiese permitido tal cosa! ¡Es indignante!" En medio de quejas y quejas hacia el cielo, y peleando ella sola, iba caminando hacia uno de los altares, en específico, hacia el principal del santuario, justo donde se depositaban las distintas ofrendas hacia aquellos que habían partido hacia el más allá, y-... Un momento, ¿Quien era la sacerdotisa Kuromi?... >Komi "No sé cuál será tu nombre muchachita, mucho menos me interesa conocerlo después de semejante acto de grosería y de falta de respeto, pero quiero que sepas que esta va ser la primera y última vez que entre a este recinto sagrado, de seguro en el Santuario hacia el norte, la sacerdotisa es muchísimo más amable, y de seguro debe ser un encanto con los niños y los ancianos" Apenas llegó hacia aquel altar, casi de inmediato depósito las monedas, como si las estuviera tirando o deshaciendo de ellas, y, por si brillo, alcanzaba a divisar una especie de piedra dorada brillante, que era puesta a un lado de la estatua del Kitsuné, el antiguo zorro que ayudaba a las almas en su travesía hacia el otro mundo... O aquella mujer era capaz de quejarse y pedir por su esposo al mismo tiempo, o de seguro ya había rezado todo lo que tenía por rezar antes de entrar a aquel lugar, y la muy descarada ni siquiera se volteaba a verte durante todo su quejido. Normalmente, cuando alguien iba a colocar alguna ofrenda en honor a su fallecido, el aire se ponía ligeramente más denso, o más suave, dependiendo de que había sucedido con esa persona durante su tiempo en este mundo terrenal... Pero con aquella vieja... Nada pasaba... De seguro eran esas malas vibras suyas siendo tan conflictivas... Cuando está terminaba con todo lo que tenía que hacer, volvía hacia donde te encontrabas, y aún después de todo ese descargue e insultos sin groserías, se atrevía a hablarte como si nada hubiera pasado... Incluso sonreía igual que la primera vez que te vio. >Komi "Muchas gracias jovencita, de seguro mi esposo podrá descansar muy bien durante esta noche" Su mano de pronto se posaba en tu hombro... Era pesada, muy pesada, demasiado pesada, tanto que hacía que todo tu cuerpo tuviera incluso un escalofrío, por no mencionar aquellas larguísimas uñas que casi que parecían garras incluso... Y ella te miraba directo a los ojos mientras todo aquello pasaba. >Komi "Que tengas bonita tarde" De pronto te quitaba la mano, y aquel pesar de desvanecía del tirón, como si nada, la vieja emprendía la vuelta por dónde vino... El aire se había colocado algo más denso dentro del santuario...

Mañana envío los turnos que faltan, el golpe que me di con la PC, ya me avisó que es tarde, kek

>>103632 OP, me esforcé mucho en mi ficha, déjame jugar ;_; >Nombre: Rubí de los forjadores eternos... O algo así... >Sexo: Niño. >Edad: 22. >Lugar de origen: Pues según mi abuelo nosotros pertenecemos al volcán Heliotropo pero toda la vida estuvimos en una choza en un bosque al Sur. >Clase: Guerrero. >Historia: La leyenda del Clan de los Forjadores Eternos: Rubí es un joven que creció bajo la tutela su abuelo, el último miembro vivo de su clan. Su familia, los Forjadores Eternos, eran una antigua línea de herreros conocidos por forjar armas tan poderosas que se decía que podían cambiar el curso de la historia. Las espadas que fabricaban no eran simples herramientas de guerra; eran consideradas divinas, forjadas con metales raros y encantadas con antiguos secretos que les otorgaban poderes extraordinarios. Los reyes, héroes y santos de antaño poseían sus obras más preciadas. Sin embargo, la envidia de los poderosos y el temor a la amenaza de un poder tan grande llevaron a que el clan fuera perseguido y exterminado. Los Forjadores Eternos fueron cazados por quienes temían que sus creaciones pudieran ser usadas para conquistar continente e incluso el mundo, y la mayoría de sus armas desaparecieron en las sombras de la historia. Cuando Rubí nació, no había rastro del clan más allá de los relatos de su abuelo, quien siempre le contaba historias de antaño mientras lo entrenaba en el arte de la herrería. El joven no vivió la caída de su gente y creer en esas historias de fantasía no era lo suyo. Sus padres fueron asesinados cuando él era aún un niño, un misterio que nunca fue resuelto. Con ellos, se desvaneció cualquier pista sobre el paradero de los demás miembros del clan. Lo único que le quedó fue su abuelo, que lo crió como una figura paternal, enseñándole todo lo que sabía sobre las antiguas artes de la herrería. Ébano y Jaspe: Las dos espadas que Inmortal lleva consigo, *Ébano* y Jaspe, supuestas reliquias de su linaje. Ébano, la espada negra y pequeña, fue forjada en el corazón de un volcán extinto, una pieza diseñada para el sigilo y la rapidez en el combate. Jaspe, la espada roja y de mayor tamaño, es la que representa la fuerza y el coraje del clan, hecha con un metal misterioso que brilla con una luz rojiza cuando es empapada en sangre. A pesar de las leyendas sobre el poder de sus armas, Rubí no las usa para conquistar ni para desatar el caos. Para él, la verdadera fuerza no radica en las armas, sino en el conocimiento y la habilidad con que se forjan. Su corazón es bondadoso y noble, nunca ha deseado usar el poder de sus espadas para causar daño. Es un joven que cree firmemente en el poder de ayudar a los demás, incluso si ello significa arriesgar su vida. Siempre está dispuesto a poner a otros antes que a sí mismo, y su actitud positiva le ha permitido hacer amigos a lo largo de su viaje, aunque nunca se ha detenido demasiado en ningún lugar. El Legado del Abuelo: Cuando su abuelo, ya muy mayor y debilitado por los años, falleció, Rubí se vio enfrentado a la última voluntad de su mentor y protector: seguir adelante con el legado del clan, y aprender todo lo posible sobre la herrería. Aunque Rubí no sabe con certeza qué hará una vez complete su misión, siente que encontrar la manera de forjar una obra maestra será su propósito, una manera de honrar a los que ya no están. Su abuelo siempre le decía que, si quería comprender el verdadero significado de ser un Forjador Eterno, debía buscar conocimiento en los lugares más recónditos del mundo, y estudiar todas las culturas y técnicas de herrería. Aunque no sabe qué hacer con ese conocimiento cuando lo adquiera, Rubí se siente seguro de que este viaje le revelará más sobre sí mismo y quizás sobre el supuesto pasado de su gente.

>>103960 https://youtu.be/JefJY8JlLA8?si=Rs193valc3vBQbMb >cada paso acerca a la viajera hacia esta aldea sin presencia humana y sin ningún tipo de medida de seguridad en caso de ataque. La aldea no tiene muros, no hay empalizada y tampoco parece que haya habido antes y que esta haya sido destruida. (Es una aldea pequeña y perdida, tal vez tengan mejores cosas que hacer además de construir muros.) >sus pies tocan el camino de piedra y la bienvenida al sitio se le es dada por la presencia inmutable del silencio y el viento que canta canciones en un idioma únicamente entendido por pocos. Su vista se mueve de izquierda a derecha por el lugar en un intento de descifrar el misterio, un misterio de casas con puertas cerradas y una ausencia total de vida..., vida inteligente en este caso, aunque esa puerta destrozada le hace ya pensar en algo. (La aldea parece haber sido atacada, pero hay algo extraño.) >se agacha para quedar de cuclillas y observar el suelo mientras sostiene su barbilla con su mano libre y una de sus cejas de fuerte forma se arquea; un suelo que no ha visto demasiado, un empedrado que no se suele ver en este tipo de pueblo pequeños... ¿Ayuda esto a resolver el misterio? Claro que no, solamente le llamó la atención. (No hay símbolos de violencia, ni sangre y ni siquiera estiércol de caballo...) >no hubo caballos aquí, aun así la falta de ellos en la cuadra abierta menciona que han sido robados o más bien han escapado en ellos, además también descansa allí una carreta que ha pasado incontables batallas. También, todavía sentada en el lugar, observa esa chimenea tapeada por alguna razón, pudiendo únicamente pensar en que estaban intentando ocultar su posición... o un intento de que nadie entre por ahí, también podría ser. (Esto se vuelve más complicado de momento.) >se pone de pie, deja el suelo detrás y comienza a caminar hacia el pozo, metiendo la cabeza en este para mirar esa lejana agua que provoca enfermedades en los cuerpos débiles. El balde ha desaparecido por alguna razón misteriosa, por lo que no podrá beber de momento. Los locales desaparecidos no quieren compartir sus recursos. >su oído capta el sonido constante y su vista se mueve hacia allí, ese local abierto no muy lejos. Al parecer algún tipo de herrería en el que hay alguien que puede responder sus preguntas sobre el sitio, pero la mujer deja esto detrás y sigue el camino hacia la iglesia donde presume están todos. No le gustan los herreros de estas tierras. > > > >su visión sigue moviéndose de un lado a otro mirando los diferentes escenarios desprovistos de personas hasta llegar al lugar, aunque más importante, la detienen en el acto las tumbas fuera del sitio. En otra situación se hubiera parado en cada una de ellas para soltar un rezo por las almas, pero esta vez únicamente puede soltar un rezo general chocando ambas palmas y cerrando sus ojos. Espera que se hayan soltado del mundo físico para regresar con los ancestros. Posteriormente prosigue con su camino ahora sí mirando mejor la iglesia, más concretamente los vitrales rotos de colores, mirando ahora el suelo con más cuidado al andar descalza. (¿Quiénes son los monstruos que destruyen la casa del Dios local? Creí que todos aquí estaban bajo las mismas creencias.) >luego se le viene a la mente esa vez en la que participó en esa pelea entre ambas ciudades idénticas y con misma cultura, ganando la del oeste y entrando a saquear la otra. Todavía recuerda lo que le pasó a esa pobre monja en los largos asientos de madera oscura... Monedas manchadas con sangre de los inocentes. Peleas de nobles. >a veces no puede dormir. >antes de entrar a terreno santo, se coloca su abrigo y piensa si debería dejar su arma afuera, aunque mirando el panorama, mejor entrar con ella. Se adentra en el oscuro lugar y lo observa un poco por encima, notando de inmediato la figura de este sujeto rezando apenas iluminado por las velas y la luz natural que viene desde las ventanas rotas. La oscuridad latente puede ser una perfecta alusión a que este Dios ha abandonado esta tierra. (Tampoco hay gente aquí.) >los asientos vacíos y en fila le recuerdan aquel saqueo en el que únicamente pudo ver, pero ahora no era momento para recordar viejas atrocidades. Camina con el arma en hombro por el pasillo con este suelo de madera chirriante más allá de que la iglesia no parezca demasiado antigua a simple vista. >el sujeto, escuchando los pasos pesados, pronto se percata y observa a la mujer de tatuajes extraños y armada, obviamente cayendo en alerta pero diciendo cosas importantes en el acto. Gaiana levanta su mano libre cual Baldwin IV y procede a interrumpirlo. Perdón por haberle asustado, no es digno de mí interrumpir a hombres en plegaria. Y perdón el arma en terreno santo, no sabía si era seguro. >por suerte o por desgracias, haciendo contraste con su apariencia extraña, la tonalidad de su voz es como la de la dulce miel, lástima tenga la garganta seca por no beber en todo el día. >primero se disculpa por sus faltas y luego prosigue. Soy Gaiana Noga Tataria, una viajera del este lejano, muy lejano. Me robaron mi equipo hace no mucho y necesitaba un lugar para pasar la noche, entonces me encontré con tu aldea fantasma.

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>menciona a ritmo pausado, haciendo una larga pausa al final para luego preguntar lo importante y por fin resolver el misterio que la mantiene inquieta. Este tipo de lugares abandonados la pone de los nervios, suerte encontró a este tipo. ¿Qué pasó aquí? El lugar no parece haber sido atacado por bandidos o merodeadores de algún ejército. >sea como fuere, lo mejor sería quedarse por aquí cerca hasta el siguiente día.