>>71937
Lograste una buena impresión con Raymond, y el, decide hacerte un presente un tanto peculiar: un billete de cero euros. Ok, no puedes comprar nada con el, pero decides no negarte a su ofrecimiento bajo la posible sospecha de hacerle enfadar, pero mientras mas lo vez, no parece ser esa clase de persona.
La conversación comenzó a virar en dirección de tu compañero Talos, quien se quedo un poco mas con el presidente Konig. Mientras esto ocurre, decides retirarte. Konig asiente y se despide de igual forma, junto a su tesorera:
Perfecto. Ten un bonito día, Akane. Recuerda preguntarme si necesitas algo— Raymond agrego con afecto, como un amigo de hace tiempo. Nozomi hizo lo mismo, con un aire presumido.
Lo que dijo el— Nozomi se rio un poco antes de continuar— Por cierto, recuerda no masticar chicle en el laboratorio de química de 3:15 a 3:16. Tú sabes, lo típico.
Aquello te dejo confusa, pero decidiste seguir por tu camino e ir a un baño. Los pasillos se sentían infinitos, el color del hierro, las paredes y los ventanales hacían de aquel lugar un encanto a la vista.
Mientras te distraes con tu celular, un grito desgarrador te regresa a la realidad; Aquel sonido recorre tu alma, estremeciéndote. Te quedas estática ante aquella sensación, sin saber que hacer. Antes de que puedas llegar a algo, el sonido de pazos se hace mas notorio, volteas, y vez a Talos y Konig corriendo.
Sin prestarte atención, Raymond te esquiva con agilidad, corriendo con mucha velocidad hacia el vacío, en dirección a la fuente del sonido; Talos, en cambio, se concentra mientras corre, como si tuviera algo en mente, listo para el impacto.
Lo único que escuchas es a Talos gritando, mientras se va directo a la puerta, abriéndola con su cuerpo, mientras cae dentro del baño de mujeres.
>>71777
La situación se comenzó a salirse de las manos: Los gritos cesaron, pero la vista de tus compañeros amenaza con ponerte de culpable. Ves al presidente corriendo, y antes de poder decir algo, el “patina” en el lustroso suelo, deteniendo su andar de golpe.
¿Qué ocurre aquí? — Notas que su voz se escucha cansada, pero cargada con un severo aire en su decir. Decides explicarle que esta ocurriendo, logrando suavizar su mirada, que antes se sentía como un arma de fuego en tu cien, lista para ser activada. El voltea en dirección al baño, haciendo una pregunta:
¿La puerta está cerrada? — Pregunto, solo para ser interrumpido por su otro compañero, quien lo hizo a un lado. Lo único que vez es a un chico de cabello verde impactando en la puerta, venciéndola, y cayendo al suelo en el proceso. No sabes que decir, y tu presiente escolar tampoco, quien voltea a verte, incrédulo ante aquella acción.
>>71834
Todo pasa tan rápido, y sin pensarlo dos veces, actuar ante aquella acción. Ordenas a Konig a que se haga al lado, mientras sigues hacia adelante, sin importarte un carajo la puerta o el castigo posterior. Sientes una pared deteniéndote en el camino, pero esta sucumbe ante tu potencia, desplazándose de lado. Touchdown, Abriste la puerta, entrando al baño prohibido de paso.
Golpeas tu cabeza con algo de fuerza, haciéndote gruñir ante la sensación de dolor, mientras observas a tus alrededores, vez a una chica de lentes y cabello rosa escondida debajo de los lavabos, abrazada a sus piernas. Al principio se sobresalta, pero al verte con más detenimiento, se tranquiliza.