>>32739
Aqui esta ese hijo de su reputisima madre con unos huevos que le impiden moverse ¡Digo! Ten la ficha, perdón por tardar, estuve dudoso en mandarla ya que no se si esta bien o bien hecha mierda, ahí tu dirás, mi KaKahuate ;w;...
>Nombre
Podrick Payne aka "El lobo blanco", "La rueda sangrienta" o "El cabeza de campana"
>Edad
24 años
>Sexo
Contigo Masculino
>Clase
Mucha, caballero Guerrero
>Raza
Humano
ide mitad demonio
>Facción
Templario
>Historia
https://www.youtube.com/watch?v=RZVyHH-voR8
Hijo bastardo de un gran guerrero de los templarios. Su nombre era Sir Eddard Payne, fue todo un famoso entre los guerreros santos de la diosa Nirvana y los pocos que le conocían, hablaban maravillas de él al punto de considerarlo el hombre mas bueno y con mas honor de todo el mundo de Arkaia, literal, nadie podia escupir pestes de un caballero con tanta alcurnia como lo era aquel sujeto de larga melena rubia y ojos tan azules como el cielo. Muchos lo apodaban "diacono del cielo" o "la mano justiciera de la diosa". Sin embargo, todo esa gloria, virtud y pundonor que le rodeaba se acabaría cuando cometió su primer y único pecado, acostarse con una golfa/furcia que desgraciadamente se toparía en la mitad de un viaje santo.
En primera no iba a hacerlo por cuestiones religiosas, siempre rezaba fervientemente cuando estaba frente de tentaciones carnales y en esa ocasión no fue distinta, se encomendó a las manos de Nirvana para no caer en las garras de la obscenidad pero al final se vio inmerso en una gran lujuria que acabaría en sexo salvaje ¿La razon? Aquella mujer le habia arrojado un hechizo extraño debido a que era una creyente del rey demonio, su deber era corromper a la oveja mas pura del rebaño de los templarios y lo logro. Esa maldita ramera revelaría su verdadera identidad, mostrándole lo que serian cuernos en su frente ¡Ella era una demonio! (Si no se puede, otra raza malosa del rol kek) Cuya tarea fue concretada, hacer ver la debilidad en los guerreros de Nirvana.
Eddard, ente lagrimas de coraje, termino la faena alargándola hasta saciar todos esos años de celibato y como no, planto su semilla en el vientre de esa desgraciada para que su vástago fuese el ejemplo viviente de que los templarios dejaron de ser lo que eran desde la edad media y que lo de hoy era el culto de los dioses ¡Nadie iba a detener al rey demonio! ¡Ni él! ¡Ni ninguno de esos débiles templarios! Lo cual, evidentemente, golpearía su espiritu al ver que toda su fe y creencias no le sirvieron de nada.
Nueve meses después, su pagana unión dio a un niño nacido fuera del matrimonio con genes demoniacos en su sangre aunque por suerte no tenia cuernos ni lucia como una abominación pero aun así haría una fuerte herida en el inquebrantable honor del Sir, quien a los ojos de sus poquísimos compañeros templarios, habia mancillado la confianza de su diosa con ese acto vil. En cuestión de tiempo, su nombre dejaría ser sinónimo de moral para pasar a ser la viva imagen del deshonor, su fama cayo y nadie creía en su palabra... Todo gracias a ese minúsculo error humano y sobre todo a la presencia de dicho recién nacido, un rosadito bebé que a simple vista lucia puro, casta e impoluto pero que en realidad representaba su pecado hecho carne y hueso.
Al inicio intento abandonarlo en un bosque, sin embargo, su responsabilidad le hacia regresar para acogerlo en brazos. En otras ocasiones, cuando se sentía impotente por el rechazo que recibía, en su mente pasaba la idea de asesinarlo para acabar con su infamia y de nueva cuenta, la culpa de tener esos pensamientos lo echaban para atrás, orillándolo a mantenerlo junto a él como su hijo. De todo modos, lo habia perdido todo, la única cosa que le quedaba era esa criatura que no tenia la culpa de nacer.
Por fortuna del infante, terminaría criando y poniéndole un nombre ¡Podrick Payne! Le dio hasta su apellido y eso que la estirpe "Payne" empezó a ser vista con desprecio gracias a su persona, actualmente se les conoce como "traidores" por el chisme que se hizo entorno a Eddard al cual lo acusaron de tener relaciones sexuales con una arzobispa del rey demonio a posta ¡En fin! El caso es que los años venideros fueron relativamente felices para un niño que crecía con la tutoría de un caballero en el sentido mas amplio de la palabra. Este le enseñaria a luchar cuerpo a cuerpo usando cualquier arma posible pero sobre todo, lo volvió en un maestro en lo que usaría hoy en día para castigar a los herejes.. Una gigantesca rueda de tortura hecha de madera y metal.
Terminado su entrenamiento, su progenitor lo abandonaría a su suerte tras estar seguro de que podia seguir su camino en solitario. Nunca le dijo a donde se iba, solo una noche se marcho y nunca lo volvió a ver, supone que se embarco a su ultimo viaje de redención para encontrar a una dichosa demonio de la que mucho le contaba, claro, nunca le revelo que era su madre, mas bien hablaba pestes de ella y cada que se embriagaba, murmuraba dormido sobre ella y como la iba a matar. Se podria decir que se obsesiono al grado de dejar a su retoño para ir a encararla y como no, ese odio fue traspasado a Podrick, sin saberlo, empezó a detestar todo lo relacionado con el rey demonio, sus arzobispos y el clan demonio... Decidiéndose a exterminarlos por su padre.
Lo poco que Eddard le dejo fue un casco de oro que usaba en sus tiempos mozos, la enorme rueda asesina y una simple pistola por si la necesitaba ¡De ahí en fuera! Estaba mas quebrado que un desierto en plena sequia, no obstante, en ese entonces era un adolescente de 18 años con toda una vida por delante, con esto en mente, no dudo en ganase la vida como alguna vez lo hizo su señor progenitor antes de haber pecado, siendo un remanente de los templarios, educado y guiado por uno de los grandes.
El tiempo pasaría volando y la vida de Podrick se resumiría en ser un perro callejero que andaba de ciudad en ciudad o de pueblo en pueblo con un solo objetivo ¡Eliminar la plaga conocida como el culto de los dioses! O cualquier secta fuera de la fe de la diosa Nirvana, tambien buscaría reunir a mas templarios con el fin de engrandecer su orden y llevarla a una nueva edad dorada como en el medievo, obvio, para un mestizo seria una tarea titánica por no decir imposible ¡¿Quien iba a confiar en un Payne después de lo que hizo su padre?! Claramente le costaría hacerse de un renombre a punta de ensuciarse las manos con la sangre de sus enemigos y eso fue exactamente lo que hizo, destruir poco a poco a los creyentes del rey demonio.
La historia se repetía, otra vez se hablaría de un errante templario con la gallardía de los guerreros de antaño y el honor de un noble a pesar de parecer un mugriento, igualmente se contaría de su hazañas (las cuales voy a implicar) que lo hacían resaltar del resto de escasos templarios aun existentes. Lo curioso es que era mas conocido por sus apodos que por su verdadero nombre y nadie conocía su rostro ya que nunca se quitaba su casco, no por nada, solo era
shy tímido con la gente que no conocía.
Sus habilidades sociales eran las justas, impidiéndole tener compañeros y haciendo que trabaje mayoritariamente solo, eso si, nunca decepcionaba cuando de "aplastar ponzoña" se refiere. En cuanto a su personalidad, la verdad se puede decir poco, suele ser alguien callado aunque tambien pude ser alguien alegre, amable y buen rollo con quienes se ganan su confianza, cosa muy difícil de lograr. Es un completo racista ante las razas que considera "perversas" y no duda en hacerles daño para purificar sus almas o eso es lo que cree, el mismo casos con gente de fe diferente e incluso repudia a los magos e hechiceras ¡Solo un poquito! Puede tolerarlos si es que no siguen a falsos ídolos o si los considera, buenas personas.
En todo caso, Podrick sigue siendo un trota mundos con el sueño guajiro de unificar a los templarios independientes y acabar con el rey demonio.
**Quiero ser la contraparte de Claus :^3*